La mesa reinaba en el centro de la habitación. Era redonda y pequeña y un trapo de color vino la cubría hasta el suelo impidiendo que el calor del brasero escapara. En una esquina un viejo televisor esperaba ser encendido y justo debajo un revistero almacenaba ejemplares antiguos del periódico local. En una de las paredes había colgado un cuadro que representaba "La última cena" y en la otra pared un reloj de cuerda cantaba las horas, las medias y los cuartos. Había una puerta que daba acceso a la terraza y rodeando la mesa en dirección al televisor había un tresillo y unas cuantas sillas vacías.
(pincha sobre la imagen para ampliar)
Ella estaba en la cocina moviendo el fuego y preparando la cena pues su marido llegaría pronto del casino y su hija había llamado anunciando que habían salido de la ciudad para pasar el fin de semana con ellos. Pronto la casa se llenaría de nuevo de vida y los nietos correrían de un lado a otro entre risas y juegos.
Después de preparar el brasero con las ascuas que sacó del hogar, retiró del fuego las cazuelas, encendió el televisor y se sentó a esperar. Al instante la puerta de la calle se abrió y escuchó los pasos de su marido por las escaleras. Apareció por la puerta y le miró. Llevaban más de cincuenta años casados y habían compartido toda una vida de sufrimientos y felicidades. Él le devolvió la mirada.
- ¿Han llegado ya los chicos?
Ella negó con la cabeza y él se sentó a su lado después de dejar su boina en el perchero de la entrada. Encendió un cigarrillo y cogió El Adelantado de Segovia. Las manos le temblaban mientras pasaba las hojas del periódico.
- Parece que tardan - dijo ella.
La puerta de entrada volvió a abrirse y tres chiquillos subieron corriendo las escaleras. Mientras, en la planta de arriba, él dejó el cigarrillo en el cenicero, le dio la mano a su mujer. Se miraron. Sonrieron. ¿Cuanto duraría aquello?
11 de julio de 2006, 22:40
¿DE DONDE HAS SACOADO ESTO? QUE QUIERO CONTINUAR !!!!!!!!!!!!
BESITOS
12 de julio de 2006, 12:37
Qué bien contado, Sacris.
Me recordó una canción:
"... Y ahora quieta en su rincón
amamantando recuerdos
con un ojo en el buzón
y pendiente del teléfono
como la loba que tuvo
a sus cinco lobitos detrás de la escoba.
Fueron dejando la cueva
y en las noches frias se siente tan sola".
Un abrazo.
12 de julio de 2006, 13:12
q bonito sacris! yo quiero saber como sigue, dime donde lo puedo encontrar ok? un beso enoorme para todos! en especial para ti sacris, ciao!
12 de julio de 2006, 13:19
Me alegra que os gustara! Lo escribí mientras iba en el tren ayer. No se si lo continuaré, la verdad... no lo creo, pero quien sabe :)
Posdata: el dibu tb lo hice en el tren, ¿que os parece mi interpretación libre de "La última cena"? jajaja, Jos ya me comentaste ayer por el messenger, aunq lo hubiera hecho en casa en una mesa no creo q me saliera mejor :P jajaja
12 de julio de 2006, 15:55
Jaja, yo soy más como tu, en lo primero que me he fijado cuando has dicho que el cuadro era de La ultima cena era en el, la verdad es que me ha hecho muchisima gracia, vas para artista bohemio jeje. Besos!
13 de julio de 2006, 16:34
Yo creo que deberias dedicarte al arte, en serio, jajajaj, me emociono el cuadro ;)