El colegio al que fui tenía un patio muy grande
con varios campos de fútbol sala y de baloncesto.
Tenía dos plantas y cuando se colaba un balón
pasaban varios meses hasta que volvías a recuperarlo.


Ayer tenía entrenamiento con el equipo de la ONCE. Entrenamos en un polideportivo que me encanta porque en las paredes que lo rodean están escritas un montón de palabras de motivación y hay una serie de dibujos con relación a la propia organización. En el techo se ven los tubos de ventilación y para protegerlos de posibles pelotazos hay una red que va de lado a lado.

Pues bien, ayer mientras estábamos calentando un compañero lanzó un balón muy alto con tan mala suerte que se coló por un agujero de la red, que está rota en algunos sitios, y se quedó arriba. No era la primera vez que nos pasaba y como otras veces cogimos otros balones y empezamos a lanzarlos hacía arriba para golpear en la red y de ese modo conseguir desplazar el balón colado hacía un agujero para que cayera al suelo de nuevo.

Pero esta vez la suerte no estaba de nuestro lado y lo único que conseguimos fue colar otros cuatro balones más. ¡Cinco balones colados! ¡Ya de perdidos al río! ¿Que más da colar cinco que seis? Con otro balón logramos bajar dos, pero los otros cuatro.... esos son los llamados héroes, a saber cuando los recuperamos.

Resulta que soy uno más de los casi cinco millones de desempleados de este país, las cosas hay que ir diciéndolas como son, y desempleado, que no parado. Pues en los casi cinco portales que uso a diario para cotejar ofertas de empleo, sin contar CV a empresas a través de internet, cartas de presentación vía postal (la de toda la vida, con sello incluido), y llamadas varias con respuestas a cual mejor.

Pues resulta que las empresas queridas de mi sector, la construcción, que no el inmobiliario, eso que quede claro. Lanzan ofertas fantasma, que ni siquiera existen tan sólo que los servicios de RR.HH han de cubrir unos mínimos de cara a la galería para que parezca que el sector mejora... pues os voy a decir lo que mejora, nada.

E igual que sucede con la construcción sucede en otros muchos sectores.

Un saludo a todos y espero que tengáis un buen puesto de trabajo porque tal como están las cosas es de agradecer.


¿Os acordáis de Juan? Juan es un chino que regenta un pequeño bar llamado “Los Peques” en Madrid al que conocí hace varios años cuando empecé a trabajar de becario y que prepara una de las mejores tortillas de patatas con cebolla que he probado. Hace más de dos años que no le veo y hoy cuando pasé cerca de mi antigua oficina decidí ir a hacerle una visita para tomarme una caña con él. Me sorprendió que se acordara de mi, nada más entrar por la puerta me dijo “Chavá!” (nunca decía "chaval") y nos pusimos un poco al día en nuestras vidas.

Me tomé una cervecita acompañada de un pinchito de tortilla (estaba tan rica como antes) y ya me fui a casa. La verdad es que me alegró volver a verle y seguro que dentro de algún tiempo vuelvo a dejarme caer por allí.

Archivo del blog

Ultimos Comentarios

Derechos de autor

Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.

No te olvides visitar

Nuestra mascota

No te olvidamos

  • MeiKo
  • Meiko

    "Haz que cada dia cuente"

¿Quienes somos?

  • sacris
  • Sacris

  • Jos
  • Jos

  • JoseFaura
  • JoseFaura

  • minel
  • minel

Escribenos

    sobrevuelo@gmail.com

¡Síguenos!

Nos visitan...

ecoestadistica.com

Cambiando el mundo

Proyde

Kyoga Foundation

Usa OpenOffice

Ubuntu Linux para seres humanos

únete

Aparcas como el culo

1 Libro = 1 Euro ~ Save The Children