Tengo algo que contar y no sé como empezar. El caso es que cuando estoy lejos del ordenador por mi mente pasan discursos enteros sobre como veo la vida, las cosas que me importan o las cosas que me molestan pero cuando por fin logro sentarme y pongo las manos en el teclado para escribirlas resulta que me quedo bloqueado. A veces soy capaz de destapar el pequeño tarro de las esencias que soy y mostrar lo que hay dentro, pero otras muchas eso a lo que podríamos llamar “La vida según Sacris” o “Filosofía de vagón” no llega a tomar forma y se queda oculto entre las musas que me visitan en trenes, autobuses y rincones perdidos de mi facultad y yo.
29 de abril de 2005, 0:38
mmm escucha a esa vocecita... esto estaba cobrando un tinte muy pesimista, y eso no es propio de ti
29 de abril de 2005, 12:11
Este tipo de reflexiones....¿se terminan alguna vez?Yo kreo ke siempre se kedan a medias...y hoy la vocecita te ha dado un buen consejo...
29 de abril de 2005, 12:53
Yo tambien tengo "Filosofía de vagón", mola esa definicion... a la vocecita hay q hacerle caso solo a veces, ya sabes tu lo q te digo.1 besote
30 de abril de 2005, 11:34
Las musas suelen viajar en trenes y autobuses, o eso creo yo. Y lo mejor es cuando te pierdes en algún rincon con ellas.
En cuanto a lo complejo, complejísimo de las relaciones... eso es lo que atrae muchas veces a estas musas, no?
Saludos.
30 de abril de 2005, 16:16
q metafísicos todos!!! jejajejajeja
Alegraos y pensad que no vais a cambiar a nadie, porque son los amigos los que te eligen a ti, no tu a ellos.Y no se puede obligar a nadie a querer, ya sea por amistad o por amor.
En esta vida las vias sobre las que circula nuestro tren suelen juntarse con otras en paralelo a lo largo de su recorrido, pero solo unas pocas no se quedan en el camino y llegan contigo hasta tu destino. Y sobre esas vias es por donde circulan nuestros amigos, los de VERDAD.
paz