oct
14
No os había contado que para este curso me había planteado salir a correr. En el lugar donde entreno con la ONCE tienen una pista de atletismo de 200 metros en la que se corre muy cómodamente y se hace menos daño al pie puesto que está fabricada para eso y cada lunes y jueves me iba una hora antes y corría 20 ó 25 minutos. Había logrado ya mantener un ritmo lento pero constante al que había llamado "trote cochinero" y con el que al paso que iba sería capaz de correr 10 kilómetros seguidos para el verano que viene, ahora iba por 3,5 en 25 minutos.
Pues bien, eso por ahora se terminó. Y se terminó porque el lunes cuando volvía para casa comencé a sentir un dolor muy característico que ya había sufrido antes: la temida fascitis plantar. Ya la padecí hace algún tiempo y lo pasé mal pero cuando lo superé después de más de ocho meses y pese a saber que es muy común recaer me sentí la mar de contento. Al día siguiente cada vez que posaba el pie era como si me clavaran en el centro de la planta del pie la punta metálica de un paraguas y siguieran haciendo presión un rato y así sigo hasta hoy.
La verdad es que me ha desmotivado un poco en una época en la que no ando muy sobrado de moral y lo peor no es que vuelva a tener este dolor sino que ahora es en el otro pie, el derecho, el que estaba sano. Lo bueno es que en el izquierdo conseguí superarlo, y además hice una guía de como lo hice para todo el que le pudiera interesar.
Esperemos que esta vez funcione.

15 de octubre de 2011, 20:12
Uff... vaya p*****
Espero que te recuperes pronto
17 de octubre de 2011, 22:25
Muchas gracias!! La verdad es que si que es una faena pero bueno.... hay cosas peores asiq... a reponerse y seguir adelante!
Un saludoo