Entre sus experiencias el otro día me encontré con este texto:
. . . .
Tambien quería hablaros de un proyecto de los que hemos visitado hoy. "Érase una vez un proyecto de canalización de agua financiado y diseñado por la comunidad de madrid que resultó ser malvado porque las tuberías reventaron debido a su mal diseño. Los amables aldeanos de la comunidad que debía abastecer esta construyeron otra reuniendo dinero, comprando nuevas tuberías y enterrándolas ellos mismos a turnos de días enteros.
Al pasar un año la malvada comunidad de madrid trató de cobrarles dinero a la comunidad de campesinos además de reclamar la autoría de la obra como suya, así que los amables aldeanos se revelaron y no cedieron. Y como la malvada comunidad de madrid no se atrevía a entrar hasta semejantes parajes donde estaba situada la aldéa, el poder de la unión de los aldeanos venció y hasta hoy viven felices con su propia canalización de agua." Por cierto, este cuento es verídico. Saquen sus propias conclusiones.
Me he dado cuenta de una realidad muy contundente y es que la gente que vive bien da lo que le sobra, los pobres dan lo que tienen, lo que les hace falta. Y eso lo estoy viviendo por estas tierras ya que nos ofrecen en muchas casas comidas y bebidas que no podemos rechazar. Y si tienen que matar a la única gallina que les queda dejando los huevos y los pollitos huérfanos, lo hacen como nos ha pasado algún día. Los pobres de dinero son más buena gente que el resto de personas.
. . . .
día 7, día 8, día 9, día 10, día 11, día 12,
día 13, día 14, día 15, día 16, día 17, día 18,
día 19